Al hilo del blog de la semana pasada, seguimos con la “serie roja”; esto es los glóbulos rojos y hoy veremos que el tamaño importa, si es así, el tamaño de los glóbulos rojos o “volumen corpuscular medio” influye de forma directa en el rendimiento deportivo.
Este volumen corpuscular medio es un parámetro que se utiliza en los análisis sanguíneos para medir el tamaño promedio de los glóbulos rojos en una muestra de sangre.
Este valor puede proporcionar información sobre la salud de los glóbulos rojos y el suministro de oxígeno en el cuerpo. Esto es, si tienes un Hematocrito alto junto a un volumen corpuscular medio elevado, puedes tener ventajas en el rendimiento deportivo.
En relación con el rendimiento deportivo, es importante destacar como os venido contando en semanas previas, que está influenciado por una variedad de factores, incluyendo la genética, la nutrición, el entrenamiento y otros aspectos individuales. El volumen corpuscular medio en sí mismo no se asocia directamente con el rendimiento deportivo, pero las condiciones de la sangre y la oxigenación pueden tener impactos en la capacidad aeróbica.
El tamaño y la forma de los glóbulos rojos están influenciados por diversos factores, incluidos algunos aspectos genéticos. Las mutaciones genéticas pueden afectar la producción de proteínas clave involucradas en la formación y mantenimiento de los glóbulos rojos. Algunas condiciones genéticas, como las anemias hemolíticas o las talasemias, pueden influir en la morfología y el tamaño de los glóbulos rojos.
Si bien el perfil genético puede proporcionar información sobre posibles predisposiciones genéticas a ciertas condiciones sanguíneas, incluidas aquellas que podrían afectar el volumen corpuscular medio, es importante destacar que éste es más comúnmente utilizado como indicador en el diagnóstico de anemias y otros trastornos sanguíneos, y no como un marcador directo de características genéticas específicas.
La información genética puede revelar la presencia de variantes genéticas asociadas con trastornos sanguíneos, pero la relación entre el perfil genético y el volumen corpuscular medio suele ser indirecta y compleja, de ahí que los perfiles que analizan este rasgo puedan predecir problemas de anemias que sí que influyen directamente en el rendimiento deportivo.
Si hay preocupaciones específicas sobre la salud sanguínea o se sospecha la presencia de condiciones genéticas que podrían afectar los glóbulos rojos, es recomendable realizar pruebas específicas y consultar a un médico o genetista para obtener un asesoramiento más detallado y preciso.
Es importante destacar que, el volumen corpuscular medio varía de una persona a otra debido a la combinación de factores genéticos y ambientales.
Las concentraciones en altura favorecen el aumento del hematocrito y están relacionadas directamente con un aumento del volumen corpuscular medio debido a la escasez de oxígeno y la adaptación del cuerpo a transportarlo de forma eficiente.
Pero como vimos la semana pasada, no solo las concentraciones en altura determinan este tamaño, si no tus condiciones genéticas, siendo importante “leer tus instrucciones”.
En resumen, los factores genéticos pueden influir en este volumen corpuscular medio y, por lo tanto, determinan la predisposición a sufrir ciertos tipos de anemias que puedan condicionarte el rendimiento deportivo, sobre todo en la resistencia.
Sin embargo, el rendimiento deportivo es un fenómeno multifactorial y debe abordarse de manera ética y respetando las regulaciones deportivas.
La interpretación de cómo estos factores interactúan entre sí, nos puede ayudar a desarrollar enfoques personalizados para una óptima preparación física para protegerte tu salud y enfocarte en el rendimiento deportivo.
